La escuela de Comunicación de Palo Alto, ubicada en California EEUU, ha hecho interesantes investigaciones en materia del lenguaje digital y lenguaje analógico,
Según investigaciones realizadas en este centro de estudios, toda comunicación es analíticamente descomponible en dos dimensiones, la analógica y la digital, siendo la analógica la encargada de transmitir información acerca de las relaciones sociales entre los intercomunicadores y la digital la encargada de transmitir información acerca de “objetos de referencia externos a dichas relaciones sociales”
Esta bidimensionalidad analógica / digital se halla presente tanto a nivel micro social (comunicación cara a cara, oral e interpersonal) como a nivel macrosocial (comunicaciones en masas).
A continuación, un ejemplo de tipo micro social donde la dimensión analógica está desempeñada por la comunicación no verbal y la digital por la comunicación verbal.
Situación: Expresar agradecimiento por una información recibida. Esta idea puede ser transmitida por muy diferentes mensajes, tales como: “Gracias por la información que me enviaste”, “Estoy enormemente agradecido por la información que me enviaste”, “La información que me enviaste va mucho más allá de lo que esperaba, mil gracias”, “Ya era tiempo de que me enviaras la información pendiente, gracias”, “Enviarme la información pendiente, era lo mínimo que podías hacer, gracias”, “La información que me enviaste es muchísimo menor a lo que esperaba, de todas maneras, gracias”, “Pensé que ya no me enviarías la información, gracias”.
En todos los casos aparece la misma información digital de comunicación verbal (un agradecimiento) pero, en cada caso, la situación social en cuyo marco se realiza el agradecimiento resulta distinto; es precisamente la comunicación no verbal (gestualización, tono, acento, énfasis) analógica, la encargada de definir ese marco social en cuyo contexto se produce la comunicación verbal, digital.
Por lo tanto, la comunicación analógica o no verbal es la encargada de definir la distancia social que une o separa a los interlocutores.
La comunicación verbal es digital gracias a que informa acerca de objetos externos de referencia, fenómenos susceptibles de ser analíticamente descompuestos de sus elementos componentes, lo cual resulta perfectamente referible por cualquier lenguaje digital.
En cambio, la comunicación no verbal es analógica es gracias a que informa no acerca de objetos de referencia externa, sino acerca de relaciones sociales internas a la situación desde la que se comunica. Las relaciones sociales (relaciones de afecto, de solidaridad, de comunidad de intereses, de rivalidad, de subordinación, de poder, o de exclusión mutua) son fenómenos cuya naturaleza solo puede ser referida y comunicada por analogía, no pueden ser analíticamente descompuestas.
Ambas dimensiones, analógica y digital, son simultáneamente necesarias y suficientes para toda comunicación. Pero la simultaneidad no implica necesariamente congruencia. En muchas ocasiones, con voluntad o sin ella, aparecen contradicciones entre ambas dimensiones de la comunicación. Ejemplo: “Un capitán le dice a un soldado, te ordeno que me desobedezcas”. En tal caso, el mandato analógico es: tú eres mi subordinado, yo soy tu superior y esto es una orden que debes cumplir ineludiblemente. En cambio, el mensaje digital es: se te pide que te comportes invirtiendo el sentido prescrito de la conducta. Si el soldado atiende el mensaje digital, incumplirá el mandato analógico. Pero si cumple el mandato analógico desatenderá el mensaje digital. Por lo tanto, no puede simultáneamente atender el mensaje digital y cumplir el mandato analógico.
Este es un ejemplo paradigmático por la que la capacidad de obrar resulta bloqueada como consecuencia derivada de las contradicciones establecidas entre los niveles analógicos y digital de la comunicación.
Si a una persona se le administran regularmente paradojas comunicacionales. Más pronto o más tarde, tendrá dificultades en su capacidad de respuesta.
Se podría decir que la comunicación analógica en un 99% de los casos es puro control social, estabilizadora de las conductas y reguladora y controladora de las relaciones sociales vigentes.
La comunicación interpersonal efectiva requiere necesariamente de ambos componentes, lo analógico y lo digital, lo gestual, lo paralingüístico y lo estrictamente verbal, ambas dimensiones se complementan para poder transmitir un
mensaje claro, contundente, preciso, convincente. La ausencia, debilidad o incongruencia de cualquiera de ellas afectará de forma importante el objetivo comunicacional. Cabe resaltar que esta aseveración tiene validez en toda la gama de comunicación humana, desde lo más informal, familiar, hasta las comunicaciones corporativas.
En materia de Nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación, conocida como “TIC”, la comunicación digital tiene otra connotación (comunicación codificada en código binario y transmitida digitalmente, es decir, comunicación digitalizada). En este contexto la comunicación analógica como tal, será casi inexistente. Existen excepciones como los llamados emoticones o smileys que intentan imitar gestos con caracteres lingüísticos.
Rafael Arellano